Mientras al otro lado del Atlántico empresas como Commodore y Atari fabricaban los primeros ordenadores dirigidos al ámbito doméstico, en Europa también aparecían emprendedores con la misma visión de futuro y, sin duda alguna, uno de los más importantes fue Sir Clive Marles Sinclair, cuyo apellido dio nombre a una de las gamas de microordenadores más populares en multitud de países entre ellos España.
Desde que fundara en 1961 su primera empresa, con la denominación Sinclair Radionics Ltd., este inventor obsesionado por la miniaturización creó calculadoras de bolsillo, ordenadores, mini-televisores, coches eléctricos y relojes con calculadora, casi siempre adelantándose a su tiempo. Fuera del Reino Unido, no obstante, por lo que más se conoció la marca Sinclair fue por sus microordenadores, de los cuales tengo una pequeña representación como puede verse en la fotografía inferior.
Sí, soy consciente de que los modelos Spectrum +2, Spectrum +3 y PC 200 fueron fabricados por Amstrad tras la adquisición por parte de ésta de todo el negocio de microinformática de Sinclair, pero son productos que seguían bajo la marca Sinclair, marca que ya pertenecía a Amstrad, y por ello los he incluido en este grupo.
En 1977 Sinclair, entonces bajo el nombre Science of Cambridge, lanza un microordenador en forma de kit llamado MK14, basado en el microprocesador INS8060, con 256 bytes de RAM, un display de siete segmentos y un teclado. Opcionalmente podía equiparse con un circuito para mostrar texto (32 columnas por 16 líneas) e incluso gráficos (con una resolución de 64x64 píxeles).
Sinclair ZX80/ZX81
Fue en febrero de 1980 cuando la empresa, que cambiaría su nombre por el de Sinclair Computers Ltd. pocos meses más tarde, presentó el ZX80, ordenador que podía adquirirse en forma de kit, como el MK14, o bien ya montado. Se trataba del primer ordenador que podía adquirirse por menos de cien libras y, a diferencia del MK14, usaba un microprocesador Z80. Esta máquina contaba con 1 KB de RAM, que podía ampliarse a 16 KB, y 4 KB de ROM en el que venía incluido el intérprete de BASIC Sinclair BASIC, tratándose de uno de los pocos equipos de la época que no contaba con una versión de este software desarrollada por Microsoft.
Como puede apreciarse en la galería de imágenes siguiente, el teclado del Sinclair ZX80 era completamente plano, con las teclas serigrafiadas sobre una membrana y teniendo cada tecla asociadas varias funciones accesibles mediante distintas combinaciones. Este teclado le hacía extremadamente plano y sus características le otorgaban un tamaño realmente reducido (aunque no tanto como el posterior ZX81), con un peso de pocos cientos de gramos.
El Sinclair ZX80 fue diseñado utilizando circuitos integrados disponibles en el mercado y lógica tipo TTL, sin ninguna característica hardware específica. Todas las conexiones disponibles se encontraban en la parte posterior: una salida para TV, una entrada y salida para casete y una ranura de expansión (véase fotografía inferior). Lo que sí era peculiar en el ZX80 era su software, por la manera en que se introducían las sentencias BASIC, funciones y otros comandos: no se escribían, sino que se obtenían con la pulsación simultánea de una o más teclas (cada palabra reservada tenía asociada un código de carácter a partir de 165, por lo que el conjunto de caracteres se veía reducido a 165). El intérprete de BASIC no ofrecía un editor de pantalla completa, sino que contaba con un área de edición en la parte inferior, como se aprecia en la segunda fotografía inferior, usando el resto de la pantalla para mostrar los resultados de la ejecución. Este BASIC además carecía de la palabra clave ELSE
y de capacidad para operar con aritmética en punto flotante.
La señal de vídeo, que permitía ver en la TV la información del ZX80, era generada por el propio microprocesador. Asimismo éste debía atender a la entrada por teclado. Este diseño hacía que el ordenador fuese simple y barato, pero como contrapartida impedía que se actualizase la pantalla mientras se ejecutaba un programa (era preciso hacer una pausa) y era además la causa del parpadeo de la pantalla a medida que se escribía.
Tras otro nuevo cambio de nombre, la empresa pasa a llamarse Sinclair Research Ltd., a principios de 1981 se lanza el ZX81, disponible tanto en forma de kit como montado y un 33 por ciento más barato que el ZX80. Esta reducción en el coste se debió a la sustitución de toda la lógica TTL por un circuito integrado conocido como ULA (Uncommitted Logic Array) fabricado por Ferranti, lo cual permitió simplificar la placa de circuito impreso usando únicamente cuatro chips: el Z80, 1 KB de RAM, 8 KB de ROM y la propia ULA. La placa de menor tamaño también se deja notar en las dimensiones del ordenador: como se aprecia en la siguiente fotografía, el ZX81 es más pequeño que el ZX80.
El intérprete de BASIC del ZX81 se alojaba en 8 KB de ROM, en lugar de los 4 KB del ZX80, lo cual le permitió incorporar nuevas sentencias y funciones y, por ejemplo, ganar la capacidad de operar con aritmética en punto flotante. Dos de las nuevas instrucciones eran FAST
y SLOW
, encargadas de establecer el modo de funcionamiento del ZX81: un modo de ejecución rápida que suspendía la actualización de la pantalla o un modo lento que permitía esa renovación durante la ejecución. La forma de acceder a las palabras reservadas y editar los programas seguía siendo la misma que en el ZX80.
Este modelo de Sinclair, el ZX81, fue el primer ordenador que tuve y también el primero con el que se iniciaron muchos programadores que ahora rondan la cuarentena. Aún recuerdo cuando lo vi por primera vez en el escaparate de Ofimática, una tienda que existía en un pasaje del centro de mi ciudad, acompañado de su impresora térmica (precisaba un papel especial) y su ampliación de memoria a 16 KB (que puede verse en la galería de fotografías siguiente). Con este ordenador, copiándolos directamente de su manual, escribí mis primeros programas en BASIC, los almacené en una cinta de casete y, con desesperación, experimenté los problemas que planteaba su recuperación, tanto por la lentitud como por los fallos en el volumen de grabación/reproducción y el famoso acimut de los cabezales. También con este ordenador hice mis primeros pinitos con el ensamblador para Z80.
Tanto el ZX81 como el ZX80 ofrecían una señal de vídeo monocroma, a pesar de conectarse a una TV no era posible utilizar colores, contando con un modo de texto de 32 columnas por 24 líneas y un modo gráfico de 64x44 píxeles que más bien podían denominarse bloques por su tamaño. Carecían de sonido.
El Sinclair ZX81 tuvo bastante éxito por el precio tan bajo a que se vendía y aparecieron clones suyos en Estados Unidos, de la mano de Timex, como el TS100 con 2 KB de RAM y el TS1500 con 16 KB integradas. También se crearon clones en otros mercados como el brasileño y argentino. Aún hoy se ofrecen kits originales para montar el ZX81 procedentes del stock original que quedó sin vender, lo cual supone un buen ejercicio para aficionados a la electrónica además de la informática.
En la ficha de este ordenador en ReturnOK facilito información adicional sobre su emulación y fotografías de todo el hardware tras abrir la carcasa, siendo fácil identificar el microprocesador y la ULA.
Sinclair ZX Spectrum
Apenas unas semanas después de que Commodore lanzase en Estados Unidos el C64, Sinclair hacía lo mismo en Europa con el ZX Spectrum. De hecho puede establecerse cierto paralelismo en el éxito de estos dos microordenadores, cada uno en su ámbito geográfico, y es que el ZX Spectrum fue el ordenador más popular en muchos países Europeos durante la década de los ochenta, algo a lo que contribuyó decisivamente la abundancia de software desarrollado para el mismo (aproximadamente unos 20.000 juegos) y las publicaciones surgidas en torno al mismo, como la mítica revista MicroHobby.
Los primeros prototipos de este ordenador se denominaron ZX82 (sucesor del ZX81) y ZX81 Colour, pero finalmente se eligió el apelativo Spectrum en el nombre para destacar el hecho de que ofrecía vídeo a color, no monocromo. Por esa misma razón la carcasa tenía en una de las esquinas un característico arco iris.
Existieron dos versiones del ZX Spectrum: una con 16 KB de RAM y otra equipada con 48 KB que, a pesar de ser más cara, se convirtió en la más popular. Cuando adquirí mi ZX Spectrum 48K (fue mi tercer ordenador tras el ZX81 y un Sony HB-55P) a finales de 1983 el precio era de 42.000 pesetas (unos 250 euros) y uno de sus mayores problemas era cómo se calentaba en las tardes de verano tras unas horas de uso. Como se aprecia en la galería fotográfica inferior, este ordenador tuvo mucho uso y el teclado tiene marcas de ello. En la caja se facilitaba, aparte del ordenador en sí, su transformador, cables para TV y casete, los manuales y la cinta Horizontes que describía las características y funcionamiento del ordenador.
Uno de los aspectos más característicos del ZX Spectrum eran sin duda sus teclas de goma blanda que daban un tacto verdaderamente especial. No fue el único ordenador en contar con un teclado de este tipo. Las conexiones disponibles eran las mismas que en sus antecesores, si bien la carga/almacenamiento en casete resultaba más rápida y a través de la ranura de expansión que existía en la parte posterior era posible conectar multitud de dispositivos que fueron desarrollándose con el tiempo, como las unidades de microdrive, impresoras, joysticks, etc.
Otra característica típica del Spectrum eran las bandas multicolor que aparecían durante la carga de software desde cinta, como puede verse en las imágenes inferiores. El ajuste del volumen del casete era un aspecto crítico para completar el proceso de carga satisfactoriamente y la ausencia de esas bandas cambiando continuamente comunicaban que algo iba mal, a pesar de que el típico pitido de frecuencia variable estuviese ahí.
El Spectrum tenía en modo texto las mismas 24 líneas por 32 columnas, pero podían utilizarse 7 colores con dos intensidades de brillo distintas y el negro, lo que daba un total de 15 colores. Un apartado en el que se mejoró considerablemente fue en el gráfico, ya que la resolución pasó a ser de 256x192 píxeles, lo cual le equiparaba a parte de su competencia. En cuanto al audio, incorporaba un altavoz interno capaz de generar una voz con un recorrido de diez octavas.
Al igual que el ZX81 duplicó la memoria ROM respecto al ZX80, el ZX Spectrum hizo lo mismo en relación al ZX81 e incluía 16 KB con un intérprete de BASIC renovado, preparado para trabajar con color y sonido, pero con las mismas limitaciones de versiones previas en cuanto a la introducción de sentencias y edición del código.
Aunque no llegó a batir los números del C64, el Spectrum vendió en los primeros 18 meses de vídeo un millón de unidades y dio lugar a multitud de clones en los años siguientes, algunos de ellos oficiales como Timex 2048 y el Timex 2068, y otros que se construyeron ilegalmente mediante ingeniería inversa en países del este europeo, la extinta URSS, Asia y América del sur, como el TK90, el Scorpion, el Pentagon o el Lambda.
Sinclair QL
Mientras el ZX Spectrum se vendía como ningún otro microordenador en gran parte de Europa, y especialmente en España, Sinclair trabajaba en el que sería su sucesor denominado con el nombre en clave ZX83 y que, a la postre, recibiría el nombre Sinclair QL (Quantum Leap). El objetivo de la empresa era construir una máquina que no sirviese solamente para jugar, como sus antecesores, sino que también fuese útil en el ámbito profesional/empresarial.
El QL era anunciado por Sinclair en enero de 1984 y comenzó a fabricarse poco después, siendo el primer ordenador basado en la familia de microprocesadores 68000 de Motorola, antes que el Macintosh de Apple, el Amiga de Commodore y la gama ST de Atari. Concretamente iba equipado con un 68008, que se caracterizaba por tener un bus de datos de 8 bits (lo cual le permitía usar memorias más baratas), un bus de direcciones de 16 bits y una arquitectura interna de 32 bits. Aunque no era tan rápido como el Motorola 68000, por la limitación del bus de datos, era mucho más veloz que los microprocesadores de 8 bits que se utilizaban por entonces en los demás ordenadores.
Aparte de su potente microprocesador (en comparación con la competencia de la época) el QL estaba preparado para comunicarse con otros QL en una red local, usar un monitor en lugar de la clásica TV (ofreciendo mejor calidad de imagen) y contaba con 128 KB de RAM ampliables a 640 KB. Además incorporaba dos unidades de microdrive integradas en la misma carcasa, lo cual le permitía cargar software y almacenar datos sin necesidad de recurrir a un dispositivo externo.
El microprocesador Motorola 68008 estaba acompañado de tres coprocesadores, dos de ellos tipo ULA, que se encargaban de la generación de la señal de vídeo, el control de las dos unidades de microdrive, el altavoz, el teclado, los joystick y la comunicación con el exterior a través de RS232 y LAN. Cada unidad de microdrive permitía almacenar 100 KB (200 KB en total) y el acceso era considerablemente rápido si se le comparaba con una unidad de cinta corriente, aunque no tanto como una unidad de disco. La ROM, con un tamaño de 48 KB, alojaba el sistema operativo QDOS y el intérprete SuperBASIC (véase debajo).
Este ordenador ofrecía tres modos de texto diferentes, siempre con 25 líneas pero con 40, 64 u 85 columnas, así como dos modos gráficos con resoluciones de 256x256 y 512x256 píxeles y 8 ó 4 colores, respectivamente, tomados de una paleta de 256. Es fácil darse cuenta de que tanto la arquitectura del ordenador, por su microprocesador y hardware en general, como el software: sistema operativo e intérprete de BASIC, son totalmente distintos a los del ZX Spectrum y, por tanto, no compatibles con el software que ya existía para el microordenador estrella de Sinclair.
Dado el enfoque profesional que la empresa quería dar a este ordenador la compatibilidad no se evaluó como una característica determinante y, a cambio, sí el hecho de que el QL fuese acompañado de software a la altura de esta máquina: base de datos, procesador de textos, hoja de cálculo y generación de gráficos. Ese software se facilitaba en una serie de microdrives, como puede verse en las fotografías inferiores, con los nombres QL-Archive, QL-Quill, QL-Abacus y QL-Easel, respectivamente.
A pesar de que las características del QL podían calificarse de sobresalientes, no tuvo el éxito que Sinclair esperaba tras la experiencia del ZX81 y el ZX Spectrum. Una de las causas principales fue la falta de software que aprovechase dichas características, así como la no compatibilidad con el ya existente para el ZX Spectrum lo que restaba atractivo para que los usuarios de ordenadores Sinclair se actualizasen: ¿si no puedo ejecutar todos mis juegos de Spectrum, para qué quiero la potencia de un QL? La producción de esta máquina se canceló en 1985, apenas un año después de su lanzamiento, y todo el stock existente pasó a manos Amstrad cuando dicha empresa adquirió Sinclair unos meses más tarde.
A modo de curiosidad, decir que Linus Torvalds aprendió a programar utilizando un Sinclair QL e hizo sus primeros pinitos desarrollando una extensión al lenguaje SuperBASIC. Durante el diseño del ordenador se desarrolló un sistema operativo específico llamado 68K/OS mucho más potente que QDOS, con capacidad para operar con varias ventanas y multitarea, pero finalmente Sinclair no lo incluyó si bien podía adquirirse por separado en una tarjeta.
En unos días pondré la segunda parte de esta entrada, abordando los Sinclair Spectrum+, Spectrum 128, Spectrum +2, Spectrum +3, PC200, el Cambridge Computer Z88 y algunas variantes de éstos.